|
Charla del Teniente de Navío Marcelo Primo sobre la
constitución de la arboladura y el velámen de la fragata:
|
|
Esta fragata es un buque velero de cuatro palos, contando el
palo bauprés, en la proa de la unidad, donde se encuentra el mascarón de
proa, la imágen de la libertad.
|
|
Excepto el bauprés cada palo cuenta con cinco vergas, en cada una de esas vergas se afirma una vela cuadra, o sea que hay un total de quince velas cuadras distribuidas cinco en cada uno de los palos, trinquete, mayor y mesana. Desde el bauprés hacia el palo trinquete se afirman cinco velas cuchilla: el petifoque, foque, fofoque contrafoque y trinquetilla. Entre el palo trinquete y mayor otras 3 velas cuchillo: Cuchilla de sobrejuanete, cuchilla de juanete y cuchilla de gavia. Entre en palo mayor y el palo mesana tres velas cuchillo: Cuchilla de sobreperico, cuchilla de perico y cuchilla de sobremesana. En el palo mesana nace una vela cangreja con botavara. De esta forma se suman 27 velas: 15 cuadras, 5 foques, 6 cuchillas y 1 cangreja. La superficie total del velámen
es de 2.652 m2. |
|
|
|
Generalmente me preguntan si los palos están
hechos firmes abajo, en la parte interna del buque y nada más, en parte es
cierto, aquí vemos el palo mayor que está firme a la quilla y tiene puntos
de fijación en la cubierta pero la fijación más importante de cada palo
está dada por todos los cables y cabos que se ven en cubierta. Todos los cables y cabos se pueden separar en dos grupos: la jarcia de labor y la jarcia firme. La jarcia firme es la que consigue que los palos se mantengan en la posición que están; cómo se logra esto?. Hacia proa los sostenes se denominan stay, son los cables de acero por donde corren los cinco foques. Hacia los costados están los obenques que es por donde corre la cabullería que forma la tabla de jarcia y es por donde los gavieros trepan para subir a los palos. Por ella llegan al primer descanso denominado cofa, hasta el segundo llamado cruceta o hasta la parte más alta llamada galleta. Hacia popa están las burdas, en las que están firmes las balsas salvavidas. Todos estos cables mencionados forman la jarcia firme y son los responsables
de sostener los palos. |
|
|
|
Jarcia firme |
|
Todos los demás cabos forman la jarcia de labor, son los que nos permiten manejar las velas, cazar las velas o desplegarlas y cargarlas o plegarlas nuevamente en las vergas. Próximas a cada palo encontramos las mesas de trabajo, con sus cabillas. Las que están muy pegadas a los palos se llaman mesas de propao y las que están en las bandas se llaman mesas de guarnición. Para realizar las maniobras en la jarcia de labor y poder bracear las vergas
la fragata cuenta con seis guinches eléctricos. Dos por cada palo. |
|
|
|
Mesa de trabajo - cabillas |
Guinche - Cazando velas cuadras |
Ustedes han apreciado que salimos con las vergas perfectamente perpendiculares a la dirección de base del buque y luego, en función de la dirección del viento debimos bracearlas, en estos momentos tenemos un viento de 90º relativo. Es decir que respecto de la línea de crujía del barco tenemos 90º hacia una banda. Este tipo de viento nos permite utilizar las velas cuadras, si estuviese por debajo de los 80º de viento relativo no podríamos utilizar las cuadras. La maniobra nos permite bracear las vergas hasta un ángulo máximo de 45 grados, lo óptimo no debe exceder los 40 grados, a partir de allí las vergas comienzan a molestar y sobreponerse al resto de la maniobra y más de 45 grados significaría pegar la verga al palo. Cada barco tiene una posibilidad distinta de navegar respecto al viento, en el caso de esta fragata, podemos utilizar los foques y las cuchillas con vientos relativos en un ángulo mayor a los 60 grados, y las cuadras no por debajo de los 80. Un dato interesante es que este barco puede navegar, con todo el velamen desplegado como en este momento a la mitad de la velocidad de viento. Estamos navegando a 11,5 nudos y el viento real en este momento es de 24 nudos. El barco está actuando como un auténtico velero,
propulsándose únicamente con la fuerza del viento. Cuando se programa la derrota en el viaje que dura seis meses, el cálculo
que hacemos es de mínima velocidad, lo que nos permite sacar mayor provecho
a las velas, consumir menos combustible y cuidar los motores. Siempre
priorizamos el concepto de que navegamos en un velero por lo que no trazamos
derrotas optimistas, calculamos una velocidad promedio de 6 nudos. |